Durante una inspección submarina rutinaria en los alrededores de la isla de Yonaguni (与那国海底構造物)(colindante con Taiwán) los científicos del Centro Geológico Oceanográfico de la Universidad de Ryukyu en Okinawa, se toparon con una estructura que se encuentra a unos 200 metros de la región de Arakawabana, y que no parece ser producto de la naturaleza, sino que se le atribuye a la intervención de la mano del hombre.
Se trata de una estructura de 120 m. de largo, 40 m. de ancho y 20 m. de alto.
Aparentemente se trata de un tramo de escaleras, con dos orificios de unos 90 cms. de diámetro y 1 metro de profundidad que se cree eran para colocar dos pilares hechos de madera. Datan de 4.000 a 10.000 años atrás.
En septiembre de 1997, Robert Schoch con Kihachiro Aratake, John Anthony West y Graham Hancock, se propusieron investigar las ruinas de Yonaguni.
El
equipo realizó una serie de filmaciones de estas estructuras, una de
las cuales mostraba una enorme formación piramidal de 80 metros.
Algunas estructuras tenían 25 metros de alto, y ángulos rectos
perfectos formando escaleras enclavadas en la roca. Otras se encontraban
a sólo 10 metros de la superficie de las aguas.
Descubrieron que, a cada lado de una especie de pasillo se veían
dos filas de megalitos, unos encima de los otros, y los bloques
horizontales tenían la misma forma que los de Stonehenge.
Al salir del pasillo divisaron dos megalitos asombrosamente regulares, que la naturaleza difícilmente podría haber colocado.
La estructura principal presenta ángulos casi rectos y bordes o esquinas bien determinadas que difícilmente pueden considerarse naturales y que se encuentran a lo largo de 5 Km. de la costa sur de Yonaguni.
Al salir del pasillo divisaron dos megalitos asombrosamente regulares, que la naturaleza difícilmente podría haber colocado.
La estructura principal presenta ángulos casi rectos y bordes o esquinas bien determinadas que difícilmente pueden considerarse naturales y que se encuentran a lo largo de 5 Km. de la costa sur de Yonaguni.
Tras
el terremoto submarino del 4 de mayo de 1998, partes de la isla y del
monumento fueron destruidas, pero luego se realizaron filmaciones
submarinas descubriendo nuevas estructuras jamás vistas anteriormente,
cuya forma es similar a los Zigurats de Mesopotamia, con características
insospechadas que, según algunos, desmentirían su origen geológico,
convirtiéndolos en los edificios más antiguos del mundo.
En julio del año 2000, un equipo de filmación de CanalHistory se
sumergió en Yonaguni para ver las ruinas de cerca. Los buzos vieron una
gran estructura plana con dos lados elevados: el denominado Escenario,
que puede que fuera un altar, un escenario o un trono. Aseguraron que
junto al Escenario había un rostro muy similar a las antiguas
representaciones de América Central, sobre todo parecido a algunas
esculturas mayas.
El
científico Misaki Kimura (木村政昭), (de la Universidad de Ryūkyū) aseguró
que esta obra fue realizada por la mano del hombre y de ninguna manera
por alguna erosión volcánica, como se pensó en un principio
En términos históricos y arquitectónicos, no se le pueden atribuir su construcción al reino de Ryūkyū, ya que históricamente, el ente es reciente (siglos XII-XVII), puesto que hasta ahora no se han descubierto las herramientas con que se han construido las estructuras y sus dimensiones son comparadas con las Pirámides de Egipto, Mesopotamia, México y Perú. También se han encontrado agujeros en las cimas de las estructuras cuya función sería dar cimiento a los postes de madera que soportaban el techo.
En
recientes exploraciones acuáticas, usando robots, análisis simples de
rocas, y una serie de observaciones subacuáticas tripualadas y no
tripuladas, fueron descubiertos un serie de puentes de tierra que
conectan el archipiélago de pequeñas islas de Ryukyu con las tierras del
continente de China (dichos puentes se hundieron debido a una serie de
cambios geológicos), así como una serie de formaciones topográficas
únicas, las cuales pueden haber sido parte de antiguos templos o
pequeñas pirámides.
El último puente de tierra que conecta las islas con China puede haber aparecido durante el último período glacial a fines del Pleistoceno, conectando una serie de importantes islas a través de Taiwán, Okinawa y Amani Oshime, con el área de Kyushu.
El último puente de tierra que conecta las islas con China puede haber aparecido durante el último período glacial a fines del Pleistoceno, conectando una serie de importantes islas a través de Taiwán, Okinawa y Amani Oshime, con el área de Kyushu.
El
hecho de que las ruinas se encuentren sumergidas, y en el caso que las
estructuras no sean de origen geológico, estas tuvieron que ser talladas
cuando el monumento se encontraba sobre el agua, es decir, en la época
glaciar, cuando los niveles del mar eran mucho más bajos debido a que la
mayor parte del agua se encontraba congelada en el hemisferio norte.
Pero afirmar esto es ir en contra de la cronología actual, oficialmente aceptada por la arqueología.
Estas
enormes construcciones requieren un nivel de organización y
planificación de la sociedad tal, que los historiadores no aceptan que
pudiera existir hace 10.000 años. Por lo tanto, si se prueba que estas
formaciones fueron realizadas por el hombre y que tienen unos 10.000
años, tendremos que revisar la historia y la cronología arqueológica
actual.
Estas estructuras sumergidas parecen dar contenido a las leyendas
de una civilización prehistórica en el Océano Pacífico llamada Lemuria o
Mu. Los japoneses llamaban a sus emperadores prehistóricos Jim Mu, Tim
Mu, Kam Mu, etc., lo que quizá significa que sus ancestros fueran
supervivientes de esta civilización. En el norte de Japón hay un
importante río llamado Mu.
El
profesor y arqueólogo Eiji Ikeda, dijo que no ha visitado personalmente
las ruinas encontradas, pero que considera que no pueden pertenecer a
la cultura de Ryukyu, ya que ésta es mucho más reciente a la fecha dada
por los descubridores de esa estructura. Aunque matizó que se deben
hacer investigaciones adicionales para probar que hubo intervención de
la mano del hombre, ya que hasta el momento no se han encontrado
herramientas de ninguna clase o restos humanos, ni siquiera
inscripciones que den pautas de su antigüedad o procedencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario